Pedro López Ferrer empezó a jugar con diez años en el
colegio de la Inmaculada y debutó en segunda división nacional con 17 años en
el Inmaculada IKE, prolongando su carrera en competición hasta los 29 años.
Como jugador fue 9 años campeón de Asturias en categoría Federada y Escolar,
participando en dos fases de sector de Campeonato de España.
Pedro tiene 23 años de experiencia como entrenador de
baloncesto: su carrera empezó en la temporada 1979-1980 entrenando al Club Vanguardia
en categoría cadete femenina. Ha entrenado, durante más de quince años, a
equipos alevines, infantiles, cadetes, juveniles y junior tanto masculinos como
femeninos, y participado en campeonatos locales, regionales, nacionales e
internacionales, cosechando en esa etapa varios campeonatos de Asturias, varios
trofeos Costa Verde y varios campeonatos nacionales e internacionales. En su
etapa más reciente en el colegio de La Inmaculada (2008-2014) contribuyó
decisivamente a poner en marcha una sección que había desaparecido casi
totalmente: en esos seis años el Inmaculada pasó de tener seis equipos a tener
diecisiete, uno por curso. El colegio llevaba más de veinte años sin ganar
ningún campeonato de Asturias y en esos seis años se ganaron tres campeonatos
de Asturias.
A su carrera como jugador Pedro López Ferrer suma su
actividad como promotor del baloncesto en Asturias: en el año 2000 pasó a
formar parte de la directiva del Gijón Baloncesto actuando como portavoz y
perteneciendo a la comisión deportiva en liga ACB y LEB ORO. En el año 2004, y
desde la Vicepresidencia del equipo profesional del Gijón Baloncesto, LEB ORO,
fundó con Félix Baragaño y un grupo de amigos, la Fundación Gijón Baloncesto,
que desde entonces preside. Preocupado porque cada vez menos niños hagan
deporte y porque el deporte que hacen es de baja calidad ha desarrollado desde
la Fundación una gran estructura donde todo el que quiera jugar al baloncesto
puede hacerlo.